lunes, 21 de enero de 2008

La afeitada

Este Yoryi me ha complicao la vida. No se llamó contento con haberme puesto a dieta también, que ahura le agarró el revire: quiere un lúc distinto. Mire usté que toda la vida costruyendo un frondoso bigote, pa que venga una mañana y diga:

-Nemesio...he decidido afeitarnos...

-Pero, Don Yoryi...qué bicho le ha picao?...ansina me lo dice...sin anistesia?

-Lo que pasa, Don Neme, es que ya estaban demasiado blancos...

-Demasiao blancos? Los suyos... Los míos son más negros que los pelos del Negro Cifuentes...Yoryi...qué tomó?

-Hoy? Café con leche...

-Le haberá puesto un poco ´e grapa... Pa mí que usté se agarró un pedalín...

-No, Neme...es para mejorar nuestro aspecto. Fíjese que a las chinas le gustan los caballeros bien afeitaditos... Nos hace lucir más jóvenes...

-Mire, Don Yoryi... Si usté ya lo tiene decidido, déale nomás... Pero pa la prósima, consulte antes. Justo ahora que me voy a encontrar con la Etelvina...

-Mejor, Don Neme... a ella le va a encantar...

-No me quiera ablandar con lo de "Neme"... Y bué... Ande manda capitál...

-Capitán, Nemesio...

-Ufa! Cómo nos levantamo hoy, eh!

-Optimista...

-Y un poco hinchapelota... Usté manda, yo obedesco...

-Con "z", Neme...

-?... Mejor me cayo...


La afeitada

Voy a afilar la cuchiya
por pedido del patrón.
Este gaucho querendón
hoy va a perder el bigote.
Lo agarraría ´el cogote...
mas le tengo compasión.

"Todo es pa vernos mejor",
el argumento esgrimido.
De no ser por lo escribido,
y por ser yo, "su creación",
le haría flor de problemón
con un jues de San Isidro.

-Mejor, tómelo con calma...
me dijo el Negro Cifuentes.
-Sea usté gaucho obediente,
no llegue la sangre al río...
Por las dudas, no porfío...
aunque me noto caliente...

Ya está. Me lo he sacao...
Pero se empañó el espejo.
Mejor, me miro de lejos
pa que no me dé cagazo.
Si al Yoryi le dió el viejazo,
vamo a hacerno los pendejos.

el Nemesio, afeitao...y raro...

Ustedes creían que se había terminao el pós? Yo también. Si hasta lo había firmao y todo. Pero vino Naides, perdón, Nadie, y comentó. Qué lo parió! Qué china rimera, che!
Sigan pa´bajo entonces, espíen su comentario, y van a ver con sus propios gojos, que no esajero ni un apéndice...
Perdón. Ni un ápice...

12 comentarios:

  1. No se me achique, Nemesio
    y hagalé caso al patrón
    que aunque medio rezongón
    sabe bien lo que le dice
    que esos cuatro pelos grises
    se los saque del mentón.

    No le de güelta al asunto
    vaya afilando la hoja.
    Y no sea boca floja,
    no le comente a Cifuentes
    no sea que el Negro cuente.
    ¡Dispues el Yoryi se enoja!


    Aunque ande priocupado
    porque se notan la canas
    y esté a dieta de manzana
    es un muchacho optimista
    y por más que le den pista
    no v'andá'ciendo macanas.

    ResponderEliminar
  2. No me queda más remedio
    que rendírmele a sus pies,
    Con la mayor honradez
    tenga mi felicitación.
    Me ha enyenao de emoción.
    Como premio, la linqueé.

    Me ha quedao la sensación
    de haberme quedao corto.
    Le juro. Entuavía absorto
    por la calidá ´e su puesía,
    le propongo, amiga mía,
    me mande su direción,
    pa poder, con mi acción,
    corresponder con justicia.
    Lo digo, sin avaricia,
    entre al grupo de edición.

    el Nemesio, anonadao y consecuente.

    ResponderEliminar
  3. Un aplauso para los dos!!
    Un placer leerlos!!
    Muy bueno!!

    Besitoos

    ResponderEliminar
  4. Doña Stella,
    Usté viene a hacer como la Celestina ´e la historia.
    No nos pierda el ilo, porque le aseguro, haberá novedades...

    el Nemesio

    ResponderEliminar
  5. Yo la Celestina?
    Juro que no hice nada!!

    Pero aquí estaremos para seguir leyendo!!

    ResponderEliminar
  6. Doña Stella,
    Cómo que no hizo nada, mi amiga? Usté, a travé de su bló, los hizo conocer a nuestros patroncito...
    Y entre los dó, algo andarán tramando, vió? Se han cruzao los imeils y andan cuchicheando por ahí...

    el Nemesio

    ResponderEliminar
  7. Seguro algo bueno saldrá de todo esto entonces, no?
    ajaja

    Besitoo

    ResponderEliminar
  8. Que dupla amigo Nemesio...hasta Guiraldes se achica...ni le digo de mi pariente!!!
    Besos a ambos.

    ResponderEliminar
  9. Ante semejante dupla
    me he quedado silente
    no es cuestión
    de darle al diente
    pa´decir cualquier pavada
    pues la carta ya está echada
    y pa ´que darle más vueltas...
    Que esta historia no termine
    ¡¡¡A la carga mis valientes!!!
    (Esto se lo robe a Solita cuando estaba en "Gran hermano")

    Besotes

    ResponderEliminar
  10. Gracias por sus comentarios,
    Stella y Claudia Isabel.
    No vuá gastar el papel
    pa escribir una pavada.
    Y, anque medio controlada,
    me carcoma la ansiedá
    no vamo a tener piedá
    con el tema de la rima.
    Si la china se me anima,
    lindo lo vamo a pasar!

    el Nemesio

    ResponderEliminar
  11. Todas la chinas
    Le hacemo verso
    al inigualable Nemesio.

    Que después no digan por "ay"
    que sus chinas no preparadas están,
    Mocitas y seductoras las chinitas
    que a su encuentro van.

    No soy tan buena como la Claudia
    ni como la Nadie, claro está.
    Trato de hacer lo mejor que puedo
    con esto del verso y ya.

    El Diosito no dio a esta china que suscribe,
    tan impecables versos,
    pero sepa usté Nemesio
    que estas trenzas con moñito
    hacen su mejor efuerzo
    para estar a la altura
    de tan lindos versos.

    Ahora me voy cantando bajito
    y silbando por ay,
    la tarde linda está
    pa´ disfrutar de un matecito ya.

    PD. sí, es efuerzo (sin S).


    Trenzas con moños

    ResponderEliminar
  12. Hola, Trenzas.
    Soy Georgie. Aprovecho que el Nemesio está como loco...Parece que hay una china nueva, que le anda arrastrando el ala...
    Imagínense... Se fué al post nuevo para conocerla, así que me quedé a cargo de este.
    Se lo merece, Nemesio. Tantos años de soledad...

    Un beso a Trenzas y al resto.

    Georgie

    ResponderEliminar

Su comentario será apreciao como corrisponde. Déjelo, nomá, que se lo guardamo.